Segunda entrega de los cromos de la liga de verano:


Jordan es el fichaje de invierno, vino por la plaga de lesiones que asoló la plantilla (microrrotura de Guzmán, falta de puesta a punto de mi hermano, advertencia de peligro por traer a un polaneco, ...). En sus primeros 3 minutos ya se convirtió en el mejor jugador del equipo en toda la liga. Destaca en esta temporada por haber recibido el segundo mejor palo (la expulsión de Alvarito), siendo el mejor palo el que le dieron al Bolas mientras el Tequila "regañaba" con Tapi.



Chuso, el tercer pulmón del equipo. Siempre llega al remate pero nunca, bueno, casi nunca finaliza (otro NO-FI). También es el Florentino ... mejor dicho el Ramón Calderón de LOS RONALDOS, nos prometió a Cesc, Gabi, Kaka, Cristiano y Robben y sólo vino Robben y Gabi, ¡¡y Robben porque ya estaba en el equipo!!.



Catalin, desde Romanía y desde la quesería, donde entrenaba para depurar su técnica dando toques con queso semi y haciendo eslálom en los pasillos con quesos curados colocados estrategicamente para ganar potencia en sus piernas. Entre sus habilidades también destacan su gusto por la fiesta.



Gabi, fichaje estrella del verano, vino como portero y debutó como delantero con uno de los mejores goles de la temporada, convenciendo al difícil público de Guadamur de su técnica de golpeo de boleas. Pudo ser uno de los motivos de la eliminación su añorada presencia en el partido de cuartos por motivos laborales.

Por cierto, este meta ya probó la mieles de jugar en el campo de fútbol del Prado en una liga veraniega al debutar con los Brutos, equipo de máxima rivalidad de Los Ronaldos.


Guzmán (foto de archivo), no llegó a debutar por una inoportuna lesión (¿microrrotura o canguelo?), de joven destacó por su velocidad (decía que hacía los 60 metros en 6 segundos) y por sus sana competición en el fútbol, pero con los años esto se tornó en perdida de velocidad y sobre todo, un gran espíritu competitivo que le lleva a practicar todo tipo de engaños y sortilegios para conseguir la victoria. En esta temporada se notó sobre todo su ausencia en la grada y su inyección de moral continua al equipo en los partidos decisivos.

Destacable como en pretemporada calificó su juego con la frase "Es el mejor pase que te puedo dar", cuando el balón pasó a 45 metros del pie del destinatario.

Esto está hecho desde el cariño, y desde el cariño se puede decir todo, y si alguien se enfada pues que se vaya del pueblo.

Proximamente más cromos, adiosito.